Con este post inauguramos una nueva sección dedicada a trucos, consejos y remedios caseros que esperamos os sea útil. Todo lo que vamos a escribir aquí lo hemos probado personalmente y hemos constatado que funciona, (quién sabe por qué motivo…), por eso queremos compartirlo con vosotr@s. Como nadie nace sabiendo, estos truquillos fueron una vez consejos que alguien nos dio en un momento dado para solucionar un problema o hacer algo de un modo más eficiente, ahora queremos que la rueda siga girando y que esos trucos sean también los vuestros.
Y para empezar un remedio casero para las molestias de garganta, muy apropiado para esta época del año en que casi todo el mundo está medio resfriado… y es que con este tiempo de locos que estamos teniendo una ya no sabe ni cómo vestirse para salir a la calle. ¿Quién no se ha levantado alguna vez con dolor de garganta?, ¿quién no ha sentido esa incómoda molestia al tragar y ha temido que fuera el presagio de estar incubando algo peor? Pues un par de días tomando esta infusión hacen milagros, y además está buena y todo. No sé si serán la miel y el limón, o será el orégano, que tiene efecto antiséptico y expectorante, pero a mí me funciona. Como contraindicaciones, el orégano no está recomendado en caso de embarazo y tampoco si tienes anemia, su alto contenido en fitatos impide la absorción del hierro.
Ingredientes:
- 1 cda. orégano seco
- 1-2 cdas. miel (según cómo te guste de dulce)
- 2 cdas. zumo de limón
Ponemos a hervir un vaso de agua y cuando entre en ebullición le añadimos el orégano, lo dejamos al fuego unos segundos y apartamos. Dejamos reposar unos minutos. Preparamos nuestra taza con la miel y el zumo de limón, colamos la infusión y mezclamos bien. Lo suyo es tomarla calentita, pero tampoco que queme porque entonces estaríamos irritando aún más la garganta. Mano de santo, oiga.
¡Qué bieeeen! No sabes lo j*****a que ando últimamente de la garganta. No termino de ponerme enferma, pero…
Esto me vendrá genial 🙂
Así ando yo también, es que este tiempo no termina de aclararse y así se cogen los resfriados. Pues ya verás qué bien te viene y todo natural, yo mientras pueda ahorrarle a mi cuerpo las medicinas lo prefiero, la verdad, ya hay otras veces que no hay más remedio… Bstos
Muy buena iniciativa el recopilar los truquillos caseros, todos tenemos alguno pero se olvidan al deshuso. Mi garganta es muy sensible y en cuanto llega el fresquito se pone tonta así que tomo miel y limón, lo caliento todo junto y me lo tomo poco a poco. Nunca lo he probado con orégano, no dudes que lo haré. Muchas gracias. Bezitos!
Yo antes de descubrir lo del orégano era también eso lo que hacía, pero con la infusión de orégano me va todavía mejor. Prueba y ya me cuentas, ¡aunque mucho mejor si no tienes que usarla! Bstos