Por fin traemos una receta de esas que llaman “de dieta” y que tanto nos habían pedido, pero sin renunciar al sabor, por supuesto. La verdad es que tanto mi marío como yo estamos bendecidos por nuestros genes y no sabemos qué es eso de estar a régimen, un regalo de los dioses teniendo en cuenta que a los dos nos encanta comer. También es verdad que en general comemos sano, pero no nos privamos de nada. Como nunca me ha hecho falta, (ahora mismo estoy cruzando los dedos con fuerza…), no controlo para nada el tema de las calorías, y espero no tener que hacerlo nunca. Qué horror que te pongan por delante un plato delicioso y lo primero que se te venga  a la mente sea el número de calorías que estás a punto de meterte en el cuerpo. A pesar de esto, tengo entendido que tanto la coliflor como la calabaza, además de tener muchas y buenísimas propiedades, tienen también muy poquitas calorías, ya que no tienen prácticamente grasas, muy pocos hidratos de carbono y una elevadísima proporción de agua. Además la coliflor contiene potasio, que facilita la eliminación de líquidos, así que se convierte en la perfecta aliada para la dieta.

Ahora estamos en plena época de coliflores, y en Harina La Carmita nos han regalado un buen montón de hermosas piezas recién recogidas, (¡gracias, Jesús!). También tenemos unos aguacates deliciosos, muy finos, cremosos y con mucho sabor, pero de ellos hablaremos en otro post, ahora vamos con las coliflores. Esta receta de crema de coliflor y calabaza está riquísima, las especias combinan muy bien y le dan un sabor buenísimo. Recomendada por tanto para los que están y no están a régimen.


Ingredientes:

  • 1 coliflor pequeña
  • 1 buen trozo de calabaza
  • 2 patatas
  • 1 puerro
  • 1/2 cebolla
  • 4 dientes de ajo
  • 1 l. caldo vegetal
  • 1/2 cdta. cúrcuma
  • 1/2 cdta. pimentón dulce
  • 1/2 cdta. comino molido
  • aceite
  • sal

Limpiamos y troceamos la coliflor y la ponemos a cocer con la cúrcuma espolvoreada por encima y un chorrito de limón para que no huela mucho. Yo la hago en el microondas con un poco de agua, a potencia máxima unos 20 minutos.

Mientras se hace la coliflor, en una cacerola con un poquito de aceite y sal sofreímos la cebolla, el puerro y los ajos, todo picado finamente. Cuando esté blandito añadimos la calabaza y las patatas peladas y troceadas, les damos una vuelta y las cubrimos con el caldo. Dejamos cocer a fuego medio hasta que estén tiernas.

Una vez que la coliflor esté cocida le escurrimos el líquido de cocción y las añadimos a la cazuela. Incorporamos el comino y el pimentón, mezclamos bien y dejamos  hervir todo junto unos minutos para que los sabores se integren. Rectificamos de sal si es necesario y pasamos todo por la batidora hasta obtener una crema con la densidad que nos guste, añadiendo más o menos caldo. Si no estamos a dieta, un chorrito de un buen aceite de oliva en crudo a la hora de batir le da un toque genial. Para la presentación imaginación al poder, lo que se os ocurra: unos chips de ajo, unas hierbas, un poco de queso rallado, un poco de crema o yogur… Yo le añadí jamón serrano picado y unas gotas de aceite con pimentón. Buenísima.