Me encanta cocinar en wok y encima es de lo más sano. Por un lado se utiliza poquísimo aceite, con una cucharada es suficiente, y por otro lado al ser una cocción muy corta, se mantienen todos los aromas y propiedades nutricionales de los alimentos.

Al empezar a cocinar por mi cuenta descubrí que me gustan las verduras “al dente”, que mantengan su textura, que crujan incluso un poquito y que se les note el sabor a cada una de ellas. Aquí estamos más acostumbrados a tomarlas muy pasadas, a hacerlas hasta que estén blandas  y casi se deshagan, mezclándose y conviertiéndose en una  pasta informe en la que ya no se pueden distinguir los sabores. A mí me parece una pena, pero bueno… sobre gustos no hay nada escrito, faltaría más.

Los woks son muy socorridos para recetas de aprovechamiento, perfectos para acabar con restos de verduras o con ese filete de pollo o de pescado que descongelaste y que todavía anda por ahí dando vueltas. En esta ocasión es sólo vegetariano, una receta sana, ligera y buenísima.

Ingredientes:

  • 1 paquete de fideos chinos de huevo
  • 1 zanahoria
  • 1 puerro
  • 1 diente de ajo
  • 4 champiñones
  • 1/2 calabacín
  • 1/4 pimiento rojo
  • 1 cdta. sésamo tostado
  • 2 cdas. anacardos fritos
  • salsa de soja

Cortamos en bastoncitos como en la foto, (que siempre queda más “chinorri”), la zanahoria, el pimiento, el calabacín y el puerro. Limpiamos y laminamos los champiñones y picamos el ajo. Preparamos los fideos siguiendo las instrucciones del fabricante y cuando los tengamos listos los escurrimos y reservamos.

Calentamos el wok al fuego un minuto y repartimos sobre su superficie una cucharada de aceite. Añadimos la zanahoria y el pimiento y los salteamos a fuego fuerte, sin parar de mover el wok con movimientos de muñeca haciendo saltar la verdura para que no pase mucho tiempo seguido en contacto con la superficie caliente, (esto lo hace muy bien mi marío que tiene más fuerza que yo en los brazos, aunque él defiende que es más técnica que fuerza…). Incorporamos el resto de las verduras, sazonamos con salsa de soja y salteamos un par de minutos más. Añadimos los fideos y mezclamos bien, espolvoreamos con el sésamo y los anacardos y le damos un par de vueltas más al conjunto. Rectificamos de salsa si es necesario y listo para disfrutar.