Volvemos con un plato de la cocina marroquí que es más conocido en su versión dulce pero que está delicioso también en su modalidad salada. Los m’hancha son unos dulces tradicionales hechos con pasta brick, (hojas de malsouka, en árabe), que se rellenan con una mezcla dulce de almendras y se le da forma de serpiente enrollada. Aunque su origen es dulce ahora podemos encontrar m’hanchas con rellenos muy variados, como carne y hortalizas o pollo, marisco y pescado, en el caso del plato de hoy.

La presentación tradicional como os he comentado es con la forma de una serpiente fina enrollada sobre sí misma, pero en mi caso no ha podido ser debido a la conjunción de una serie de errores que ahora mismo os voy a desvelar, por si así puedo evitaros la humillación pública.

Error nº1: Utilizar pasta filo en vez de masa brick. La pasta filo es muy muy fina y delicada, dos características que no comparte con una servidora, y resulta muy difícil de trabajar. La masa brick es más gruesa y aguanta más.

Error nº2: Utilizar pasta filo y además seca. Si habéis utilizado antes la pasta filo ya sabréis que se seca con muchísima rapidez, hay que conservarla bien cerrada o cubierta con una trapo húmedo y además consumirla sobre la marcha. Bueno, pues ni una cosa ni la otra. La utilicé para hacer un strudel de manzana y me olvidé de ella durante días, perdida en la nevera. Para cuando quise utilizarla estaba un pelín petrificada y se quebraba como una oblea a la menor intención de doblarla. ¡Ah! También hay que sacarla de la nevera unas horas antes de usarla para que se atempere. Pues tampoco, oiga. Qué prodigio de mujer.

Error nº 3: Querer hacer una anaconda en lugar de una serpiente del montón. En vez de dividir el relleno y hacer varias serpientes pequeñas, delgadas y fáciles de manejar, quise hacer una pitón con la digestión pendiente de 10 conejos. De perdida al río…

M'hancha de pollo y frutos de mar

Mi serpiente, oronda y sin enrollar

Era consciente de todos estos errores a la hora de intentar montar la serpiente, pero una vez que me pongo soy inmune al desaliento, (otra manera de decir que soy cabezona), así que al final, y visto que era imposible darle forma de espiral, decidí que la mía iba a ser una serpiente desenrollada y listo. En fin… que enrollada o sin enrollar está riquísima, y eso es lo importante, ¿o no? Que la disfrutéis y ya sabéis qué tener en cuenta a la hora de hacerla, de los errores se aprende.

Ingredientes, (para 4 serpientes):

  • 300 g carne de pollo
  • 80 g fideos de arroz
  • 300 g champiñones
  • 100 g calamares
  • 100 g gambas
  • 100 g pescado blanco (yo puse rosada que era lo que tenía en el congelador, pero podéis utilizar cualquiera)
  • 1 cebolla grande
  • 4 dientes de ajo
  • 10-15 hebras de azafrán
  • 1/2 sobre colorante
  • 1 1/2 cdta. pimentón dulce
  • 1/2 cdta. jengibre molido
  • 50 g mantequilla
  • 8 hojas de masa brick
  • 2 cdas. perejil picado
  • 2 cdas. cilantro picado, (yo no le puse)
  • 1 huevo
  • 1 limón
  • 4 cdas. aceite, (si tenéis de cacahuete o de sésamo podéis utilizarlo mezclándolo con el de oliva, le da un toque muy rico)
  • pimienta
  • sal

Ponemos en remojo los fideos de arroz.  En una sartén grande calentamos el aceite y rehogamos la cebolla y el ajo picados con un poquito de sal y el azafrán hasta que esté blandita. Añadimos el pollo picado pequeño y los champiñones en dados. Incorporamos los calamares troceados, la pimienta, el colorante, el jengibre y el pimentón. Removemos bien, añadimos 1/4 vaso de agua y dejamos cocer unos 8 minutos. Si son de los largos, cortamos los fideos remojados en trozos más pequeños con ayuda de unas tijeras y los incorporamos a la sartén junto con las gambas y el pescado a dados. Continuamos la cocción otros 3-4 minutos y añadimos las hierbas y la mantequilla a trozos. Mezclamos bien y para terminar vertemos el zumo del limón, removemos y dejamos que se cocine todo junto un minuto más. Dejamos enfriar el relleno y le escurrimos el líquido que pueda tener, para que no ablande la masa al rellenarla.

M'hancha de pollo y frutos de mar

El relleno sobre la pasta filo listo para ser enrollado.

Sobre un paño de cocina disponemos dos hojas de masa brick encabalgadas una sobre otra, para que nos quede una serpiente bien larga. Colocamos una tira de relleno en la parte de abajo y con la ayuda del paño las enrollamos con delicadeza de abajo a arriba. Batimos el huevo y sellamos los extremos con él. Lo pintamos con el huevo o con aceite y lo vamos enrollando sobre sí mismo, de forma que nos quede una espiral. Hacemos lo mismo para las otras 3 serpientes.  Volvemos a pegar los extremos con huevo para que no se nos abran en la cocción y las llevamos al horno sobre una bandeja engrasada unos 5 minutos a 200º, hasta que estén doradas. Como yo no podía enrollar aquello de ninguna manera, lo coloqué como pude en la bandeja, le puse dos ojitos de clavo para que no se diga que no cuido la presentación y para dentro. Estéticamente no es que quedara muy bonita pero de sabor es otro tema. Un toquecito de canela espolvoreada por encima… y deliciosa.

Fuente: Delicias de Marruecos, Unilibro Ediciones, C.A.